El piloto francés Sébastien Loeb, nueve veces campeón del mundo de rallies, aseguró que este año es su última oportunidad de ganar el Dakar, pues en la próxima edición ya no estará la marca francesa Peugeot con la que ha corrido los dos últimos años.”Para mí es un poco el año del ahora o nunca para ganar. Es mi última oportunidad de lograrlo”, afirmó Loeb en un comunicado de su equipo.El francés, noveno en el Dakar de 2016 y segundo en el de 2017, explicó que el año pasado se vio con opciones reales de ganarlo, y valoró la labor de su copiloto Daniel Elena en la navegación.”Eso te hace estar motivado. Sabemos que lo podemos hacer y yo voy con el objetivo de vencer. Eso es seguro”, reiteró Loeb, quien comparte equipo con sus compatriotas Stéphane Peterhansel, vigente campeón, y Cyril Despres, además del español Carlos Sainz.El piloto galo advirtió que el rally es largo y duro, ”porque rápidamente puedes perder todo por poco, especialmente con el regreso de las dunas”, un terreno que admitió que no le es favorable.Loeb consideró que el retorno de las dunas, con seis etapas en el desierto peruano, ”es positivo para el rally”, aunque reconoció que es un tipo de escenario en el que no tiene mucha experiencia.Por su parte, Peterhansel valoró que el Dakar 2018, que recorrerá Perú, Bolivia y Argentina, evoque los orígenes africanos de la prueba ”con mucho desierto, dunas y puede que algunos vuelcos en las especiales más largas”.”Creo que será una edición más difícil que las anteriores. Se prevé más abierto y puede que no se imponga el que sea más rápido”, auguró Peterhansel, trece veces campeón del Dakar, seis de ellas en motos y siete en coches.El piloto indicó que su objetivo es revalidar su victoria y aseguró que este año se siente con menos presión que en las ediciones anteriores.Peterhansel también destacó que el Peugeot 3008 DKR con el que correrá tiene mejor rendimiento que el del año anterior, porque es más largo y más fácil de controlar en los giros, según lo que ha podido comprobar tras más de 5.000 kilómetros de entrenamientos, una distancia superior a todos los tramos cronometrados de este Dakar.