El piloto mexicano Roberto González se enfrentó a una complicada carrera el pasado fin de semana en el Sebring International Raceway, donde tuvo lugar la segunda ronda de la temporada 2018 del IMSA WeatherTech Sportscar Championship.

Sebastián Saavedra fue el encargado de emprender la competencia, el piloto colombiano partió desde la decimoquinta posición en la parrilla, sin embargo durante los primeros giros se vio involucrado en un accidente, donde resultaría volcado otro auto.

El Ligier LMP2 del equipo AFS/PR1 Mathiasen Motorsports no resultó con daños considerables, y pudo reincorporarse rápidamente debido a la bandera amarilla que ondeó en el circuito para retirar al malherido auto #64 de la Scuderia Corsa. En el pit-lane, el equipo realizó algunos ajustes y cambio de nariz, regresando a la competencia con sólo una vuelta perdida.

En la primera hora de la justa, Saavedra se mantuvo a los mandos del auto #52, ubicándose dentro del top 15 durante este periodo. Por su parte, el equipo decidió realizar una estrategia de dos turnos por piloto a partir de ese momento.

En la segunda hora de carrera llegó el primer cambio de piloto, Saavedra entregó el auto en el décimo lugar a Gustavo Yacamán, quién para la tercera hora de la competencia pasaría el auto a Roberto Gónzalez.

En el turno del mexicano, aparecieron algunos problemas en el auto, y tuvo que ingresar al taller en dos ocasiones, donde se realizaron ajustes importantes. Finalmente, se cambió la batería y alternador. Desafortunadamente, se perdieron al rededor de 20 vueltas en esta labor. González pudo regresar a la pista, para completar un turno doble.

Minutos antes de llegar a la mitad de la justa, el regiomontano entregó el auto a Saavedra. El bogotano completó otro turno doble, para después hacer un cambio con Yacamán. Ambos se mantuvieron dentro de top 15 de la clase, hasta después de la marca de ocho horas en el reloj.

Tras completar un turno de aproximadamente 1 hora, Yacamán pasó los mandos del auto a González, quien tendría de igual manera un turno final manteniéndose dentro del decimotercer lugar.

El último tuno de la competencia fue para Sebastián Saavedra, quien fue el encargado de llevar al auto #52 a la línea de meta, cruzando en el 32° lugar general y 11° de la clase.

Roberto González: ”Fue una carrera bastante difícil, pero estoy contento de haber regresado a Sebring después de 6 años. Empezamos muy bien, desafortunadamente mi compañero Sebastián tuvo un accidente bastante fuerte al inicio de la carrera en la curva 17, se dañó el frente de auto y la parte trasera. Los mecánicos hicieron un excelente trabajo cambiando las piezas, afortunadamente no hubo daño en la suspensión y pudimos continuar. Sin embargo, tres horas después empezamos a tener problemas eléctricos, debido al accidente. En un principio no encontramos cuál era la falla, estábamos perdiendo potencia en el auto. Paramos y tratamos de cambiar las baterías y volvimos a salir. Después descubrimos que un cable del alternador se estaba trozando, en total perdimos 29 vueltas, la mayoría de ellas en el taller. De ahí en adelante fue otra carrera, dando vueltas, tratando de mantenernos fuera de cualquier problema, y terminamos en onceavo”.

El siguiente compromiso en la agenda de González será junto al equipo Dragon Speed en el Prólogo del FIA World Endurance Championship, los días 6 y 7 de abril en el Circuito Paul Ricard en Francia.