La FIA investigará las pistolas que sujetan las ruedas de los monoplazas. El motivo: la excesiva cantidad de incidentes relacionados con las paradas en boxes en las dos primeras carreras del año. Primero fue el doble abandono de Haas en Australia cuando salieron a la pista con neumáticos mal apretados. Después, el grave incidente de Raikkonen, que en Bahréin atropelló a uno de sus mecánicos porque el semáforo de su garaje le indicó que el cambio de neumáticos había terminado cuando todavía estaban trabajando con su rueda trasera izquierda.

Charlie Whiting, el Director de Carrera de la Fórmula 1, afirma que estudiarán los últimos sucesos y tratarán de prevenir más problemas en el futuro relacionados con las pistolas y reconoce que ya seguían el caso desde que Alonso perdió una rueda en la primera jornada de test en Montmeló y que ya fue discutido por todas las escuderías. ”Parece cada vez menos una coincidencia”, dice el dirigente.

La principal causa, aunque parezca lógico, es el tiempo que emplean los mecánicos en cambiar las cuatro ruedas: desde que no hay repostajes de gasolina, la maniobra es cada vez más rápida en todos los boxes, cercanas a los dos segundos. La misma pistola suelta la tuerca de la rueda vieja y aprieta la de la nueva y con sensores (que pueden fallar) confirman que la fuerza empleada es suficiente. La diferencia es que antes el mecánico de la famosa piruleta avisaba sl piloto de que la parada había terminado, y ahora es un semáforo que cambia a verde cuando entiende, según los sensores, que todas las pistolas han terminado su trabajo... aunque salte a la vista que un grupo de mecánicos sigue intentando soltar un neumático.