La tarde del sábado se ha desarrollado con mucho menos drama en el Rally de Portugal. La cita lusa que vio caer durante la etapa del viernes a gran parte de los favoritos al triunfo, vería como la aparición de algunas pequeñas precipitaciones alteraba el grip de los tramos. Donde sí habría numerosos cambios sería precisamente en WRC2, categoría en la que el vigente campeón, Pontus Tidemand, volvería a imponer su ritmo.

Los tramos de la tarde comenzaban con los ojos puestos en el cielo. Las pocas nubes presentes dejaban su huella al paso por la segunda especial con una ligera lluvia que complicaría incluso más el agarre en las especiales y que obligaría a los equipos a hilar muy fino con las montas de neumáticos. Breen y lo Hyundai decidían salir a los tramos con una monta ‘segura’ de cuatro blandos y dos duras con el objetivo de no volver a sufrir lo mismo que ayer, mientras que Elfyn Evans saldría con tres blandos y dos duras, buscando en este caso defenderse de un incisivo Dani Sordo que terminaba muy cerca tras el bucle de la mañana.

El galés se defendía a la perfección en estas condiciones de seco con parches muy mojados, cediendo algunos segundos respecto al líder, Thierry Neuville, pero marcando distancias respecto a la pareja cántabra que debía en esos momentos fijarse en los jóvenes finlandeses que apretaban en la lucha por el podio. Los errores se sucedían y veíamos sendos trompos de Mads Ostberg y Sordo, además de una pequeña excursión de un Lappi que conseguiría salvar la papeleta.

Los cinco segundos que Carlos del Barrio anunciaba de perdida serían prácticamente calcados, llegando al quinto Split con seis segundos cedidos respecto a Teemu Suninen, su principal amenaza en la lucha por la tercera plaza del podio. Los 37 kilómetros de Amarante verían como la lluvia arreciaba, obligando a Dani a emplearse a fondo en la segunda parte del último tramo para tratar de contener la brecha de tiempo con Teemu Suninen, el cual estaba sufriendo con la monta cruzada. Sordo no conseguía acercarse a Elfyn Evans, sin embargo, conseguía retener el último escalón del podio por sólo 4,7 segundos.

A falta de los poco más de 50 kilómetros cronometrados de mañana, Neuville tiene un colchón de casi 40 segundos en la que puede ser su segunda victoria de la temporada, mientras que Sordo ya se encuentra a 18 segundos de la segunda plaza ocupada por un Elfyn Evans que es consciente de que no puede cometer un error si no quiere perjudicar el resultado de M-Sport en marcas. Suninen, el cual también sumará puntos para los británicos después del abandono de Ogier el viernes, tiene a Sordo muy cerca y parece tener mejor ritmo que un Esapekka Lappi que ha sufrido hoy con el Toyota Yaris WRC. Tampoco estaba demasiado cómodo Mads Ostberg con el C3 WRC, pero aun así el noruego sigue siendo el mejor representante de los franceses.

La mejor noticia para Citroën Racing llegaba de la mano de Kris Meeke, el cual salía del hospital después de recibir el ok de los médicos. En WRC2, el C3 R5 parecía quedarse sin la tan deseada victoria en tierra después de caer Lefebvre a la tercera plaza tras el último tramo. Pontus Tidemand escalaba hasta el liderato, demostrando una vez más que es el piloto más destacado dentro de la categoría.