Los autoa de Andretti Autosport habían ofrecido grandes sensaciones, pero casi todas las miradas estaban situadas en Ryan Hunter-Reay, algo que el veterano piloto de Dallas confirmó en Libres 3. No obstante, los cambios del viernes al sábado funcionaron de forma impecable para su compañero más competitivo, Alexander Rossi, quien consiguió recuperar la magia de 2018 y firmó su segunda pole consecutiva en Long Beach.

Tras liderar su grupo de la primera ronda con el mejor tiempo general, y pasar sin muchos problemas en el Fast 12, el piloto californiano se hizo valer ante ”su” afición con una inusual mejora sustancial en su tiempo, registrando un 1:06.481 que se quedó a dos décimas del récord de la pista, la pole de Hélio Castroneves en 2017 con los aerokits (1:06.225). Mientras, Hunter-Reay lo veía desde el muro, ya que un error estratégico en el Fast 12 con el uso de los neumáticos le dejó en séptima posición.

Rossi batió a un Scott Dixon que parecía imbatible tras su buen ritmo en libres y liderar el Fast 12, y así lo empezó a mostrar liderando tras el primer intento. Durante su segundo intento, un par de curvas comprometidas y un error de comunicación con su equipo hizo que Dixon levantase el pie cuando estaba en disposición de mejorar su tiempo, aunque no lo suficiente para contrarrestar la vuelta posterior de Rossi, que obtiene su quinta pole position en la categoría.

Tras el mal fin de semana en Barber, Penske regresó con la totalidad de su formación al Fast 6, incluído un Simon Pagenaud que no se veía en estas lides desde el pasado mes de julio. Aún así, el francés fue de nuevo el menos veloz de su equipo, en quinta posición, mientras que Will Power batía al líder Josef Newgarden por la tercera posición. Por segundo finde consecutivo, Graham Rahal consiguió entrar en el Fast 6, y su sexta posición abandera otra parrilla sólida para su equipo.

Durante el Fast 12, Felix Rosenqvist se postuló como un claro candidato para la pole position habiendo marcado un tiempo de 1:06.695, muy cercano al de Dixon, y más que suficiente para pasar de ronda. Pese a ello, el sueco buscó mejorar en un segundo intento y terminó golpeando con fuerza los neumáticos de la curva Firestone tras una pasada de frenada. La consiguiente bandera roja y pérdida de tiempos le mandaron al duodécimo lugar, y permitió a Newgarden pasar de ronda.

Takuma Sato, ganador en Barber y que parecía también con ritmo suficiente para otro Fast 6 tras liderar su grupo y los primeros minutos del Fast 12, cometió el mismo error estratégico que Hunter-Reay y clasificó octavo. Completando el top 10, terminaron los dos promocionados de Indy Lights, con Patricio O’Ward superando a Colton Herta tras una gran clasificación en la que coquetea con posiciones más altas. Ambos superaron a Marco Andretti, por primera vez éste año en el Fast 12.

La primera ronda dejó como eliminaciones sorprendentes las de Sébastien Bourdais y James Hinchcliffe. El primero, que no ha terminado de estar cómodo este fin de semana, no completó una vuelta sólida en su grupo, mientras que el segundo se vio notoriamente perjudicado, al igual que su compañero Marcus Ericsson, por un accidente de Tony Kanaan en los minutos finales que les impidió a ambos mejorar su posición. Con la gran igualdad existente en parrilla, cualquier error puede costar caro, y Long Beach muerde como pocos.