Se Corona el Botón Inglés

“Somewhere, ther’s a siren singing...”
Pearl Jam

Falta Abu Dhabi, pero para efectos prácticos ya el campeonato mundial de 2009 se acabó con la corona para Brawn GP en constructores y para Jenson Button en pilotos. Y me podrán decir lo que quieran, pero yo veo un nivel muy pobre en los últimos dos campeones, ingleses, ambos por lo que la prensa de la Gran Bretaña los alaba como la mexicana a los ratones verdes; sí, así de desproporcionada es la cuestión, pues nadie me irá a decir que Jenson es el mejor piloto del mundo, título que puede quedar en las manos de Alonso, Kimi o incluso Vettel, pero ciertamente no en las del piloto de Brawn, en mi humilde opinión.


Realmente este es uno de esos años en que gana el auto gracias a una ventaja tecnológica, como fue el doble difusor,  y el más certero de los pilotos del equipo es el que aprovecha la misma para coronarse, y además, el segundo piloto tiene muy mala suerte. Jenson todo lo bueno, Rubens todo lo malo, que culminó con una llanta ponchada en Brasil, pero se unió a los problemas de caja que lo aquejaron intermitentemente, a los del control de arrancada que le hicieron perder varias salidas importantes, a las desatenciones en los foso en cuanto a estrategia que le robaron sitios mejores a costa de su coequipero o de otros pilotos. En fin, se olvida todo y en los récords quedará que Jenson fue el que más ganó en 2009 y se coronó, pero sin mucho brillo. Y otra vez fue un brasileño el que lo apretó hasta el final y le exigió, aunque en este caso se trata de Rubinho no de Felipe, quien, por cierto, sigue diciendo que deberían anular el GP de Singapur 2008 y dale el título a él, cosa que apoya Nelson Piquet (el papá, no el chavo), al asegurar que Alonso sabía del accidente premeditado de Nelsinho.


Hay muchas cosas que no me satisfacen del año, quizás lo que más me molesta es que el mejor auto en diseño puro, que es el RB5, no se haya coronado, pero creo que cuando uno juega bajo las reglas, no haciendo las trampas que acostumbra Ross Brawn, es más orgullo ser el mejor aunque el campeonato se vaya por otro lado. Y lo que se me hace curioso es la mala suerte que tuvieron todo el año los que acechaban a Button desde el segundo sitio. Bastaba que un piloto, fuera Rubens, Vettel o Webber, llegara a ponerse de sublíder y amenazara al inglés para que tuviera carreras con problemas, penalizaciones y fallas misteriosas, hasta me pone a pensar si no habrá tomado unas clases de vudú en el Caribe el buen Ross durante su sabático. El caso es que primero se pagó Rubens, luego Sebastian (sin acento, que no es latino), luego Mark, luego Rubens de nuevo y ahora veremos si Vettel puede mantener el segundo sitio en la carrera final, aunque no le interesa mucho la idea de ser subcampeón.


También me parece que el año próximo veremos el nivel real de la gente de Brawn GP y Jenson retomará su lugar como buen piloto, pero nada excepcional. Es más hasta posible sería que no vuelva a ganar nunca si no el dan un auto muy superior. Y eso de que todo es paz y alegría, hermandad y buena vibra en Brawn, nada más me pone a pensar que la gente es tan crédula que seguramente piensan que Rubens se va porque busca mejores oportunidades, cuando es claro que no le gustó el trato, pues no es lo mismo ser segundón de un volante muy bueno como era Michael Schumacher, que segundón de un volante mediano como Button. Y ya veremos si en el Williams-Cosworth de 2010 encuentra mejor trato.


Pero el ya campeón Button, pese a todo lo que ha ganado, no ha firmado para 2010, pues cuando se subió a b Brawn hizo ewl sacrificio de ganar solamente 7.5 millones de dólares en 2009, cuando su sueldo pactado era de 15 millones con Honda. Ahora Jenson dice que merece regresar a su nivel, y un poquito más, pues ya es campeón y se sacrificó este año. Ross, quien le dio el auto que lo volvió de nada a ídolo en siete carreras (las primeras de 2009) no está muy de acuerdo y no quiere pagar, muy a la Frank Williams, pero además sabe que no hay asientos buenos disponibles, a menos que Button se quiera ir a McLaren a batallar con Lewis en un mano a mano que no tendría mucho sentido. Y a ver quien puede más, si el piloto o el dueño.


Lo cierto es que una amiga fanática de los autos dice que, aunque no sea el mejor campeón, ciertamente “es el más guapo desde Ayrton, pero su novia está bastante equis”. Ni modo, yo me fijo en las manos y la coordinación, otras ven cosas que uno ni toma en cuenta, aunque si estoy de acuerdo que la novia del volante inglés –con barba de tres días a la ‘Miami Vice’– está bastante equis. Habrá que pedirle a las lectoras una lista de los campeones más galanes de la historia para completar la anécdota.

ENCORE
Y perdido entre el alud noticioso del fin de semana, tendremos dos mexicanos en F1 en las pruebas de fin de año en diciembre. El primero es Esteban Gutiérrez, de Monterrey, quien estará en un BMW F1.09, que ha mostrado buenas hechuras en las últimas carreras, como por ejemplo ayer en el GP de Brsil con el segundo sitio de Robert Kubica. Esteban podrá probarlo y darse cuenta de lo que necesita subir su nivel para llegar a la máxima categoría, y a la vez será el piloto mexicano más joven en subirse a un auto de este tipo, en serio. El otro es el capitalino Pablo Sánchez, quien ayer con su triunfo en Monza pudo obtener el tercer sitio del campeonato italiano de F3 y ganar el derecho a probar el Ferrari F60, primer mexicano en subirse a esta marca desde los hermanos Rodríguez, lo cual es otro hito de importancia en el automovilismo mexicano. Y lo interesante es que Sergio Pérez, a quien todos veíamos como el más cercano, ha tenido la mala suerte de sufrir la desaparición de Honda, firma que ya lo iba a probar a fines de 2008 o principios de 2009, y ahora será el tercero de los tres que están en Europa en asegurar una prueba de F1, si es que consigue una en el invierno próximo.
© CEJV/SHRAC/2009