1 Memo Rojas II
2 Esteban Gutiérrez
3 Sergio Pérez Mendoza
4 Yair Godìnez
5 Salvador Durán
 
 

Falleció uno de los Fundadores de la Scuderia: Alejandro Rodríguez
Junio 10 de 2009
Por Carlos E. Jalife Villalón

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El lunes 8 de junio a las 11:50 PM falleció en la ciudad de México, donde había nacido casi 54 años antes, Alejandro Rodríguez de la Vega, hermano de Pedro y Ricardo, y uno de los tres fundadores de la Scuderia como asociación civil.
Alejandro había estado teniendo algunos problemas de salud recientemente y una insuficiencia cardiaca terminó con su vida tras estar internado cinco días. Su única hermana, Conchita Rodríguez y su cuñado Raúl estaban en Acapulco, donde se han mudado por la enfermedad de ella que la obliga a estar a nivel del mar, a usar un tanque de oxígeno y le impide estar mucho tiempo en la ciudad de México. Por ello, los otros dos fundadores de la Scuderia, Nacho Segura y Carlos Jalife, además del presidente de la misma, Chacho Medina, se hicieron cargo de la situación desde el fin de semana, reportándose constantemente al puerto guerrerense.
El lunes en la tarde la situación se agravó por lo que los tres contactaron al Pbro. Tarcisio de la parroquia de la Hostia Sangrante, para llevarle los Santos Óleos a Alejandro en la noche del propio lunes, pues el equipo médico encabezado por la Dra, Cruz Zambrano y el especialista Rafael Orrico temían que no pasara la noche. Tras despedirse de Alejandro y dejarlo más calmado, a la mañana siguiente fueron informados que su amigo no había resistido la noche.
Nacho y Carlos se hicieron cargo de los trámites de reconocer el cuerpo, hablar con la funeraria, y despedir a la carroza que lo trasladaría, con Nacho firmando los documentos mientras Carlos veía cuestiones de ropa y arreglo de Alejandro, y Raúl y Conchita emprendían el camino por carretera a México. Carlos pasó a su casa a cambiarse para ir a la funeraria de J. García López en Versalles y Gral. Prim, Col. Juárez, donde se velaría el cuerpo, y aprovechó para mandar otro correo a la membresía de la Scuderia y dictaría otro a su hijo Javier para que lo mandara mientras él estaba con Nacho en la funeraria viendo la apertura del velatorio.
En la capilla los alcanzó Chacho a las 4:00 de la tarde del martes 9, y juntos los tres esperaron los restos de su amigo recibiendo a los dolientes mientras llegaba la familia Castellano Rodríguez ya cuando la noche caía sobre la capital mexicana. Velaron hasta las 10 de la noche pasadas, con Alejandra y Susana, hijas de Raúl y Conchita, acompañando a sus padres y fueron llegando algunos de los familiares de Alejandro, quien se caso varias veces y tenía tres hijas y algunos hijastros (as).
El miércoles estaba contemplada la misa de cuerpo presente y el entierro en la cripta familiar en el Panteón Español, junto a sus hermanos, pero la Beneficencia Español requería de un consanguíneo en primer grado para diversos trámites y Carlos llegó a las 9:00 AM a la capilla para abrirla y recibir a la gente mientras la Conchita iba al panteón a los trámites. La cuestión se fue alargando, lo que permitió que Carlos localizara a la primera hija de Alejandro, quien ya le había dado dos nietos, y la citara en el Panteón. La misa de cuerpo presente se efectuó finalmente una hora más tarde de lo previsto, a las 12:30 PM y para entonces también había arribado de Monterrey Patricia, la otra hija de los Castellano Rodríguez. La capilla número siete estaba llena por amigos y familia y tras la ceremonia se fueron en cortejo hasta Tacuba a la cripta familiar. Ahí llegaron algunas personas más y se procedió a enterrar el cuerpo en el nicho inferior del lado derecho, debajo de su mamá y de Pedro, frente a su papá, Ricardo y Federico. Posteriormente, Carlos organizó una pequeña ceremonia, como las que tantas veces Nacho, Alejandro y él habían hecho en los aniversarios luctuosos de Pedro y Ricardo, y Chacho tomó la palabra para hablar un poco del fundador de la SHRAC; luego Raúl habló a nombre de la familia y, finalmente, se le despidió con un minuto de aplausos cuando el reloj marcaba las 15:50 de la tarde del miércoles 10 de junio de 2009. Descanse en paz…

© CEJV/SHRAC/2009